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PARQUE DE LAS ESCULTURAS EN SANTIAGO DE CHILE
Un ejemplo a imitar
Las inundaciones provocadas por el
Río Mapocho (que atraviesa Santiago de Chile) en el año 1982, se llevaron por delante grandes márgenes ribereños de la
costanera.
De la crisis a la posibilidad de generar algo nuevo debido al efecto inesperado
de la madre naturaleza hubo un sólo paso. Cuatro años más tarde se comenzaba a
replantear el territorio colindante al río y se construye un sitio destinado al
arte y la cultura.
El Parque de Las Esculturas, a orillas del río Mapocho, tiene
como uno de sus objetivos principales el atraer a un público observador y con
deseos de encontrar un lugar tranquilo en medio de la ciudad. El Parque es una
muestra al aire libre de destacados premios nacionales y extranjeros. Elaboradas
en metal, madera, fibras y otros materiales, la exposición tiene un predominio
de obras clásicas, abstractas y surrealistas.
El Parque comienza su vida con la escultura de Marta Colvin,
premio Nacional de Arte (1970), “Pachamama”, que le da un tributo a la madre
tierra.
Solitaria por un par de años, la obra de Colvin se vio acompañada de tres esculturas más el año ’88: "Erupción" de Sergio Castillo, “Puerta de Agua" de Raúl Valdivieso y “La Pareja" de Juan Egenau.
A cargo de la Corporación Cultural de Providencia, se logró crear un ambiente
paisajístico de gran nivel en los iniciales 15 mil metros que comprendía el
parque a finales de los ’80. El espacio se califica como "sendero autoguiado".
Los usuarios de parques y plazas de la comuna de Providencia, encuentran aquí información sobre las especies vegetales existentes y su interacción con el medio ambiente. Se destaca la presencia de especies en riesgo de extinción, y en ese sentido el parque cumple una importante labor informativa, fomentando la protección de las mismas.
La cartelería presente en el área es sumamente ilustrativa, clara, y cumple a la perfección con el propósito arriba mencionado.
Convertido en un paseo “obligado” para turistas deseosos de otra visión
capitalina y de su cultura, lugar de descanso para los oficinistas y amantes
esporádicos de lugares sin mirones, el Parque de las Esculturas ofrece una
treintena de obras que representan las visiones escultóricas más consagradas de
Chile.
Debido a la construcción de la Costanera Norte, autopista subterránea de alta velocidad, el parque recibió una extensión de su territorialidad y un número de obras nuevas como compensación. Hoy se contabilizan 22 esculturas.
La galería creada en 1988 hace las veces de salón de exposiciones de nuevos talentos. Este mini oasis de naturaleza y cultura también se ha convertido en el centro de un buen número de presentaciones musicales y actorales.
Gracias a la larga extensión del parque, se ha podido realizar otras actividades artísticas y fundamentalmente musicales, ya que el parque puede albergar aproximadamente a 4.000 personas sentadas.
La "topiaria" también tiene aquí su expresión, a través de un cedro curiosamente esculpido, semejando una figura humana.
Cada verano el parque se engalana con el Festival Internacional de Jazz (Providencia Jazz), que llega a congregar a más miles de personas por noche en un escenario urbano-natural de gran atractivo.
En medio de una ciudad que, como todas las grandes ciudades, se debate por la necesidad de nuevos espacios urbanos, en la proposición de
la arquitectura urbanística a escala humana y en la búsqueda de espacios de paz,
el Parque de las Esculturas ofrece todo esto sumado a una mirada directa al
legado artístico de gran parte del siglo XX y de los inicios del XXI.
Dentro de los ejemplares vegetales, nos sorprendió la presencia de la Acacia visco, "visco" o "viscote" en Uruguay, aquí llamada "vilca" (foto abajo). Son pocos los individuos que quedan en parques de Montevideo. Su ramificación y textura de follaje liviana, la hacen sumamente atractiva.
El "árbol de Judea", que muestra sus flores rosadas en gran profusión en primavera, se encuentra ahora fructificado. La silueta de la araucaria australiana, llamada aquí "pino bunya", es inconfundible.
La Lagerstroemia indica, aquí "crespón", en nuestro país llamada más comúnmente "espumilla", luce su excelente floración estival.
Excelente diseño y buen gusto, prolijidad, mantenimiento altamente dedicado, son virtudes a imitar para que nuestros espacios verdes luzcan como aquellos cuyos gestores y usuarios han comprendido que el buen estado de los mismos es reflejo de la cultura del lugar.
jardinenuruguay.com Febrero de 2011 CURSOS
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Parque de las Esculturas
Avenida Santa María 2201 - Santiago de Chile
Entrada libre
Fuente:
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